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Al pensar en lugares creativos, generalmente, imaginamos un estudio de arte, un teatro o quizás una sala de juegos para niños. La mayor parte siempre olvida el trabajo. Probablemente porque la vida de oficina tradicional, lo que muchos ven como una  rutina de 8 a 5 en un cubículo, no deja mucho espacio para la creatividad. Después de todo, tienes una cantidad fija de tareas a realizar y prefieres no intentar algo nuevo, ¿te identificas?

Ser creativo en el trabajo generalmente implica tomar riesgos, lo que puede hacerte dudar. El miedo a lo desconocido es algo poderoso, especialmente cuando significa que podrías fallar. Esto no solo va para los empleados, sino también para los gerentes; de hecho, los jefes tienen la capacidad de desarrollar estas competencias en su personal. ¡A veces hay que empezar desde arriba!

Veamos por qué la creatividad es necesaria para un trabajo óptimo y cómo los gerentes pueden fomentar este espíritu:

Pensamiento creativo y resolución de problemas

Ser creativo en el trabajo va más allá de hacer la hoja de cálculo más bonita o la presentación de PowerPoint más colorida. Nos referimos a implementar el pensamiento creativo y la resolución de problemas.

El pensamiento creativo es bastante simple de definir, pero un poco más difícil de implementar. Básicamente, si eres un pensador creativo se te ocurren ideas que son completamente únicas.  Es en este sentido que perder el miedo y tener una lluvia de ideas personal siempre es fructífero. Una ventaja adicional de ser un pensador creativo es que entiendes el éxito en el fracaso: para obtener resultados positivos, antes tendrás que cometer errores. La curva de aprendizaje implica que no todas tus ideas serán millonarias pero con cada intento te acercarás a ello. Si siempre tratas de tener éxito (porque el fracaso no es una opción), es muy probable que te quedes dentro de tu burbuja. Los resultados seguros te llevarán a cumplir la tarea pero nunca a dar la milla extra.

Si bien muchos problemas en el lugar de trabajo tienen una o dos soluciones claras, las personas creativas tienen la capacidad de ver todos los aspectos de los problemas y, muchas veces, pueden encontrar soluciones nuevas e interesantes. Los colaboradores y gerentes se benefician de esto porque puede llevarlos, y a la empresa, en una dirección totalmente nueva.

¿Qué pueden hacer los gerentes?

Si eres un gerente y no puedes evitar sentir que tu personal carece de inspiración, es hora de comenzar a fomentar la creatividad.  Algunas cosas que puedes hacer, de acuerdo a las competencias que desarrolla, son:

Fluidez: Al momento de tener reuniones, no termines hasta que se hayan propuesto más de tres ideas sobre el mismo tema. Puedes realizar ejercicios semanales, en los cuales se alienta a los empleados a encontrar múltiples usos para un objeto ordinario.

Elaboración: Los ejercicios para esta competencia requieren explorar los detalles, puntos de vista y perspectivas de la información existente.  Reta a tus colaboradores a que describan una experiencia usando todos sus sentidos.

Originalidad: Mantén una lluvia de ideas semiregular con tu personal y motivalos a dejar de lado las ideas que definitivamente funcionarán.

Como líder del grupo, puedes fomentar el pensamiento creativo en tus empleados, pero también es bueno reconocerlo y elogiarlo. Es muy fácil rechazar una idea porque piensas que no funcionará, pero reprimir a los pensadores creativos significa que la innovación se verá sofocada y será menos probable que propongan cosas nuevas. Además, el liderazgo creativo reconoce el riesgo de probar cosas nuevas y no teme el fracaso.

En estos días, la creatividad se ha vuelto más importante que nunca para asegurar que un lugar de trabajo funcione de manera feliz y produzca conceptos innovadores. Al hablar de clima organizacional, este es un factor determinante. Si deseas aprender más sobre cómo puede mejorar un gerente te invitamos a descubrir nuestra Facultad de Ciencias Administrativas y Comerciales.